COSMETOLOGÍA
POST ACNÉ
El acné puede dejar secuelas: marcas, poros dilatados o rojeces que persisten incluso después de controlado. Abordamos estas consecuencias con tratamientos avanzados como láseres de regeneración, microdermoabrasión y terapias con ácido hialurónico, diseñados para suavizar cicatrices, cerrar poros y unificar el tono.
No dejes que el acné defina tu piel. Devuelve la suavidad, luminosidad y confianza a tu rostro. Resultados transformadores desde la primera sesión.
¿Cómo funciona?
01
Lesión inicial:
Un grano grande e inflamado sobresale por la acumulación de sebo, bacterias y células muertas, causando dolor, enrojecimiento y obstrucción profunda del poro afectado.
02
Aplicación del láser:
El dispositivo láser dirige energía precisa al folículo, reduciendo bacterias, inflamación y producción sebácea, ayudando a desobstruir el poro e iniciar un proceso de reparación controlado en la piel.
03
Reducción de inflamación:
Tras el láser, la lesión se achata y pierde volumen; el poro se limpia y la inflamación disminuye notablemente, permitiendo que la piel comience a cicatrizar de forma natural.
04
Regeneración del tejido:
La zona muestra una superficie más uniforme mientras se reorganiza el colágeno, reduciendo enrojecimiento y fortaleciendo la piel, favoreciendo una recuperación progresiva sin irregularidades significativas.
05
Piel recuperada:
La piel vuelve a verse lisa y uniforme, sin inflamación ni abultamientos, mostrando una reparación completa del tejido tratado y un aspecto saludable tras finalizar el proceso de recuperación.